"Endeavor te da la confianza para pensar en grande, a largo plazo y hacer siempre las cosas bien"
Colegium nace el 2000 cuando los socios Ariel Gringaus y José Manuel Barros acababan de graduarse de ingeniería en la Universidad de Chile. Al salir dijeron, ¿por qué no emprender? una palabra que no hacía mucho sentido para la época pero que sin embargo fue el camino que decidieron tomar.
El primer año de egresados se lo tomaron para pensar qué iban a hacer, ellos solamente tenían decidido que querían para sus vidas el camino del emprendimiento. Fue así como empezaron a investigar el mercado y se dieron cuenta de que había una oportunidad de negocio en los colegios. Los padres querían más información de sus hijos por parte del colegio y estos no tenían las herramientas suficientes para entregárselas.
“¿Dijimos por qué no hacerlo nosotros?, estamos hablando del año 2000, ¡era una locura! Encontramos una persona que tenía un software muy bueno y nos asociamos con él. Fue así como desarrollamos un modelo de negocios súper interesante y muy disruptivo para la época”, comenta Ariel Gringaus.
Así, hoy son líderes en el mercado y con presencia en Chile, Colombia, Brasil, Uruguay, México, tienen proyectos para seguir su proceso de internacionalización. “Nuestro plan es seguir escalando y seguir creciendo de forma orgánica e inorgánica. Somos anticíclicos así que nuestro plan es ir con todo por seguir creciendo sin parar”, asegura Ariel.
Dentro de los factores que explican el crecimiento exponencial de Colegium está la cultura que han ido creando con el transcurso de los años. En una mezcla que contempla elementos como una buena cultura organizacional, un lugar entretenido para trabajar y una empresa que desafía constantemente a los trabajadores a crecer.
“Tenemos una cultura diferenciadora que hace que nuestro nivel de servicio sea superior a cualquiera que haya en la industria. Cuando los colegios entran a Colegium es difícil que se vayan, porque tenemos una forma de hacer las cosas y resolver los problemas muy particular”, asegura Ariel.
Esta forma de trabajo les ha permitido tener una tasa de retención sobre el 98% lo que habla del trabajo que están haciendo con sus clientes.
La pandemia encontró a Colegium en pleno proceso de un cambio en el sistema tecnológico. Su idea era cambiar progresivamente pero apenas implementaron, de una semana a otra tuvieron un incremento de ¡501% en la tasa de uso!, cifra impresionante, que no se esperaban y que hizo que fuera una semana de locos: equipos sin dormir para atender las demandas de los clientes y mucha presión.
Sin embargo, esta presión auto impuesta por alcanzar la excelencia no lo ven como un problema sino como una oportunidad de seguir creciendo. Así, mientras la pandemia afectó negativamente a miles de empresas a nivel mundial, Colegium ha contratado gente que coopere en la misión de ayudar a los clientes para que puedan seguir operando con la mayor facilidad posible, cuestión fundamental para la empresa.
Sobre el rol que ha tenido Endeavor para Colegium, Ariel afirma que una de las cosas principales es que “te ayuda a cambiar la forma de pensar de cómo hacer las cosas. Te dan la confianza para pensar en grande, a largo plazo y hacer siempre las cosas bien”.
Otro de las cosas importantes que resalta Ariel es la disposición en ayudar que tiene la red de Endeavor. “Cuando necesitas resolver un problema ves la agenda de contactos y en un click te puedes conectar con alguien. Todos te ayudan y eso es genial porque hay pocas redes de personas que realmente te quieren ayudar para que te vaya bien, en general todo es muy competitivo. La red de Endeavor es muy colaborativa y eso marca una diferencia que en otros lados no se ve”, asegura.