Nació en Siracusa, una ciudad industrial al norte del estado de Nueva York y sus estudios en Georgetown le permitieron aprender una mezcla de idiomas, economía, historia y ciencias políticas y especializarse en la Unión Soviética. Llegó a Chile en 1982, donde según ella se enamoró del país y su cultura.

Kathleen se graduó de la Universidad de Georgetown en Washington DC, con enfoque en economía internacional. Entre sus labores actuales se destaca ser Directora de de la Cámara Chileno Norteamericana de Comercio, Principal de Asesorías KCB Ltda, compañía que se enfoca en el fomento de la actividad comercial entre Chile y Estados Unidos, sumado a ser directora en varios países y organizaciones sin fines de lucro en Chile y en el extranjero. Fue managing director de JP Morgan, directora del Banco Bice y Bice Vida y actualmente es figura activa en asuntos culturales y académicos, incluyendo su participación en la junta directiva de la Universidad Adolfo Ibáñez, miembro del Consejo Asesor del Centro de Estudios Públicos (CEP) y past president de la Pan American Development Foundation (PADF).

Es parte del directorio Endeavor Chile desde su fundación, por lo que en conversación con los anteriores directores se le recomendó que asumiera la presidencia por su experiencia en gobiernos corporativos que ayudará en la continuación de la transición. Porque según ella misma, su liderato es una transición, no sólo porque durará 2 años, si no porque ella misma cree que «es momento que los emprendedores asuman el liderazgo».

Los 3 ejes más importantes de su mandato

En primer lugar, Barclay afirma que continuará en la misma línea que su antecesor Christoph Schiess, pero que guiará a Endeavor Chile a que sea un lugar donde los emprendedores sean los protagonistas. “Esta red fue fundada por empresarios que querían hacer una retribución a la sociedad y entendían que el emprendimiento era importante para el país, pero en algún momento los emprendedores tienen que ser dueños o tienen que liderar Endeavor. El proceso lógico es que tomen la posta. Hoy tenemos una red de emprendedores más fuerte, con emprendimientos más maduros. No tengo dudas de que esta nueva generación de emprendedores Endeavor está preparada para encabezar esta organización”.

Uno de los focos principales que tiene Kathy para su gestión, es la internacionalización de los emprendedores. Para ello, quiere seguir abriendo puertas y conexiones con países de distintos continentes. “Queremos consolidar la relación afuera porque los emprendedores hoy día para escalar tienen que salir a América Latina, a Estados Unidos, a Europa, a Asia. Es necesario tener la capacidad de hacer las conexiones que ellos requieren”.

También, uno de los principales objetivos es aumentar la presencia femenina en Endeavor. “Tenemos planes para el directorio, con los consejeros y mentores, y también la idea de mejorar el sistema de selección de emprendedoras en Endeavor. Estamos identificando a mujeres emprendedoras y por eso hoy el directorio es 50% femenino”.

Por último, menciona la importancia que tiene aportar datos al debate público. “Queremos entregar data al gobierno sobre cuál es la diferencia entre negocios de alto impacto que quieren escalar rápido y generar cientos de empleos y compañías medianas y pequeñas. Hay una gran diferencia entre ellos”.

La visión de Kathy de Chile y el emprendimiento

A finales de los años 90, Barclay dictaba clases en los MBA en Chile, donde le preguntaba a sus alumnos quiénes querían emprender. Ella dice que la mayoría respondía que querían ser gerentes financieros o CEO de empresa del IPSA, por lo que se dedicaron a mostrar el perfil del emprendedor y mostrarlos como héroes en la sociedad. Y hoy destaca que no hay universidad que no tenga cursos de emprendimiento, y que el concepto emprendedor ya está instalado. “En su momento, los primeros emprendedores de Endeavor tomaron aún más riesgo, porque era muy cuestionado. ‘¿Por qué están haciendo eso?’, les decían. Y francamente, a finales de los ‘90 y principios de 2000 era muy fácil encontrar un buen trabajo en una compañía y tener una buena trayectoria de escalamiento dentro de ella, porque el crecimiento en Chile era 7%-8%”. Entonces hace la comparación con el día de hoy, y afirma que al haber un estancamiento en la economía, acceso a la educación y menor oportunidad en las empresas, hizo que las personas cambiaran su forma de pensar y que en vez de esperar muchos años por un alto puesto en una empresa, tomaran riesgos y llevaran a cabo ideas en base a necesidades.

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